Cómo solucionar problemas de pareja sin morir en el intento

Las relaciones amorosas son tan únicas como complejas. Aunque quizás al principio todo sea color de rosa, a medida que la convivencia avanza comienzan a notarse las diferencias que hay entre ambos y surgen las primeras discusiones. Por eso, aprender a solucionar los problemas de pareja es una tarea en la que los dos debéis aplicaros si queréis que la relación marche bien.

5 claves para solucionar los problemas de pareja

No hay una fórmula mágica para arreglar conflictos amorosos, pues, como hemos dicho antes, cada pareja tiene sus peculiaridades. Además, las causas de los problemas, la personalidad de cada miembro e incluso el contexto, pueden condicionar la situación. Sin embargo, hay algunas pautas que son indispensables para que podáis resolverlo todo de la mejor forma posible.

• Esperar un tiempo antes de hablar: no es buena idea discutir justo en el momento en que surge el malestar, pues las emociones negativas van a dominar la situación y podéis terminar diciendo cosas de las que os arrepentiréis.
• Expresar: una vez ha pasado el punto álgido debéis sentaros y comunicar vuestros sentimientos y pensamientos al otro. Hacer como si nada hubiera pasado solo servirá para acumular rencores en ambos lados y corréis el riesgo de crear una brecha insalvable después.
• Basarse en los hechos: evitad asumir la razón que ha tenido la otra persona para decir o hacer algo. Muchas veces los problemas surgen motivados por la imaginación, así que intentad ser objetivos y no dejar que la mente os juegue malas pasadas.
• Enfocarse en el problema: es muy típico traer a colación conflictos antiguos que no se solucionaron a tiempo para tratar de ganar una discusión. Esto es un error, porque ambos terminaréis frustrados e intentando hacer un balance para ver quién ha fallado más y perderéis de vista los verdaderos motivos que han causado la situación actual.
• Ser empáticos: ponerse en los zapatos del otro es, quizás, la cualidad más importante para llevar una discusión a buen término. Intenta comprender el punto de vista de tu pareja y comunica el tuyo de forma asertiva para que ella pueda hacer lo mismo. Solo así podréis mirar las cosas desde una perspectiva diferente que os ayudará a hallar una solución.

Cómo fortalecer la relación tras un problema de pareja

Superar con éxito un problema de pareja es satisfactorio, porque a medio y largo plazo esos obstáculos son los que consolidan una pareja. Sin embargo, los días posteriores son delicados, porque las emociones suelen estar a flor de piel y la relación se encuentra en un punto frágil. Por eso te damos algunas recomendaciones para que os aseguréis de pasar página y recuperaros del bajón.

Tomar un tiempo para desconectar

Si ha quedado un mínimo asunto por discutir, hasta el más pequeño contratiempo puede ocasionar una nueva discusión. Por eso, es buena idea pasar un par de días fuera del hogar para que os olvidéis un rato de la rutina y sus desafíos, y os centréis o en disfrutar. Un fin de semana de hotel o un pequeño paseo a un pueblo cercano pueden marcar la diferencia.

Hacer una actividad que ambos disfrutéis

No hay mejor forma de reavivar la complicidad que haciendo algo que os guste a los dos. Puede ser una degustación de vinos, un masaje en pareja o una simple tarde de películas. Lo importante es que esa actividad se convierta en un momento que os recuerde lo bien que lo pasáis juntos.

Traer al presente los buenos ratos

Releer las cartas que os escribíais al inicio de la relación, mirar juntos álbumes con fotografías de ese primer viaje, o tan solo rememorar las experiencias divertidas que habéis vivido os ayudará a valorar vuestro tiempo juntos y pasar página.

Solucionar problemas de pareja no es algo sencillo, pero es necesario que cada uno haga el esfuerzo por intentarlo. Si estás atravesando por esta situación o acabas de superarla, nuestro Ecoresort puede ser ese lugar en el que culminéis la ansiada reconciliación. Un romántico espacio en medio de la naturaleza y con filosofía slow para que ambos olvidéis los malos ratos y os ocupéis el uno del otro. Aquí siempre os estaremos esperando.